martes, 22 de enero de 2013

COMENZAR DE NUEVO








No os acordéis de las cosas pasadas, ni traigas a memoria las cosas antiguas.

He aquí yo hago cosa nueva; pronto saldrá a luz; no la conoceréis? Otra vez abriré camino en el desierto y ríos en la soledad. (Isaías 43:18-19)

Quizás la única forma natural que tiene el ser humano de olvidar el pasado es  sufrir un golpe  tan fuerte en  la cabeza que le produzca perdida permanente de la memoria, lo anterior para mencionar solo una opción, aunque un poco cruel, pero como Dios es experto  en la ejecución de  cosas sobrenaturales de el proviene nuestra habilidad para poder comenzar de nuevo olvidando quienes fuimos sin necesidad de perder la memoria.

Olvidar para comenzar de nuevo no es simplemente obligarme a dejar de pensar en algo o en alguien, debo entender que todas las cosas implican un proceso, que podría ser diferente en cada persona, a continuación mencionaremos algunos puntos importantes que nos pueden ayudar en ese proceso de restauración.

Olvidar es un proceso que implica, perdón, arrepentimiento genuino, sanidad, intimidad con Dios y reestructuración personal.

 PERDON: Debemos perdonar  a quienes nos han herido y también debemos perdonarnos a nosotros mismos, porque hemos permitido que otros nos transgredan y ultrajen nuestra dignidad. (Mateo 6:12)

ARREPENTIMIENTO GENUINO: porque muchas veces hemos actuado bajo nuestro criterio haciendo lo que consideramos mejor para nuestra vida, o tomando decisiones  estando sujetos a la prisa. Ignorando por completo los planes de Dios y su perfecta voluntad para nuestra vida, sufriendo tristezas y decepciones, pero debemos tener en cuenta que esas tristezas y decepciones también tienen un propósito divino. (2corintios 7:9)

 

SANIDAD: Tranquilidad y paz en nuestros pensamientos y en nuestro corazón hacia aquello que nos ha causado dolor y angustia, como dice el viejo refrán después de la tormenta llega la calma. Sanidad también requiere dejar que Dios sane nuestras heridas  y este es un proceso que  se va llevando a cabo en la medida en que Jesús va removiendo las raíces de amargura y toda la suciedad que haya en nuestro corazón, actuando con su amor como una medicina a la enfermedad. (Mateo 9:12)

 Lo anterior es como si tuvieses una habitación muy sucia y llena de objetos inservibles y necesitas entrar en ella para buscar una pequeña aguja, sería un poco difícil verdad; pues igual sucede con nosotros es muy difícil que nuestras heridas sanen si seguimos anclados al dolor y a la vida de siempre. Es tiempo de renovarnos.

 

INTIMIDAD CON DIOS: descansar y pasar tiempo con  Dios, implica más que decirlo, es algo que involucra derramar tu  alma con todo lo que haya dentro delante de el,  antes de hacerlo con otra persona (amigo, familiar, compañero…), porque cuando logras descargarte entregándole tu peso a un ser que todo lo puede, puedes tener la certeza de que esa carga no irá más contigo porque ese ser maravilloso te dará descanso, pero sin en vez de eso lo haces primero con otra persona solo habrás reproducido tus sentimientos porque por más que esa otra persona te ame no podrá hacer algo sobrenatural en tu vida. (1samuel 1:15)

 

REESTRUCTURACION PERSONAL: Debemos recordar quienes somos en Cristo, que fuimos hechos  a su imagen y a su semejanza, que  fuimos declarados más que vencedores desde antes de nacer, debemos recuperar nuestro sueños y volver a poner nuestros ojos en aquellas metas que nuestro padre celestial nos hadado, recuperando las ganas de vivir, recuperando nuestra vitalidad y las riendas de nuestra vida. (Romanos 8:37)

 

Recuerda que lo que tú viniste a hacer a este mundo nadie lo hará por ti.

Vas  dejar esa obra inconclusa? Anímate a comenzar de nuevo aunque ya lo hayas perdido todo, recuerda que si algo no puede llevarse el ladrón de sueños, (quien quiera que sea en tu vida) es tu dignidad y tus ganas de vivir.

 
Ahora sí, con el corazón limpio y libre de cargas olvidemos lo que ya paso, porque el pasado ya no existe, y lo único bueno que dejo es que  logro influenciarte de tal manera que ahora en Dios eres una persona mucho más fuerte, porque a pesar de lo vivido tú continuas aquí en este mundo.

Perdón, arrepentimiento genuino, sanidad, intimidad con Dios, y reestructuración personal son algunas palabras claves para la búsqueda de nuestro futuro.

Bendiciones sobrenaturales te desea el placer de estar en su presencia.